Sabemos que muchos de nosotros amamos las plantas. Ellas representan la vida y el poder inmenso de la naturaleza. Sin embargo, el gusto o interés por ellas no siempre es suficiente. De hecho, en aras de darles un buen cuidado y fortalecer los procesos de cultivo, es primordial descubrir la mejor manera de alimentarlas, potenciando el acceso a minerales y recursos fundamentales para su buen crecimiento. Frente a lo anterior, es muy normal tener que enfrentarse a falta de información o a la escasez de herramientas y sustancias que favorezcan al ambiente. Por esta razón, en este artículo de Ecología Útil te hablaremos sobre fertilizantes naturales y caseros.
Índice
¿Por qué elegir fertilizantes naturales? Principales ventajas
Los fertilizantes caseros y naturales permiten el re-aprovechamiento de desechos y residuos orgánicos. Gracias a esto, no solo se disminuyen los niveles de desperdicio, sino que, al recuperar la materia orgánica del suelo, se impulsa la retención de nutrientes y la fijación del carbón. Así se logra que el suelo absorba mayores cantidades de agua, favoreciendo la alimentación de las plantas.
Por otro lado, los fertilizantes sintéticos favorecen la contaminación de aguas y suelos. Además, conllevan hacia el exceso de minerales en suelos, empeorando la calidad de estos e impulsando la desertificación. Por si no fuera poco, pueden conllevar riesgos de intoxicación para el humano.
Ya conoces las principales razones por las que los fertilizantes naturales son una grandiosa opción, ahora es momento de conocer algunos de los más comunes y utilizados.
Ten en cuenta estas recomendaciones de fertilizantes naturales para plantas
Son muchas las posibilidades cuando se habla de fertilizantes caseros. Sin embargo, hay algunos que son usados con más frecuencia y que demuestran mejores resultados. Entre ellos se encuentran:
1. Fertilizantes con recorte de hierba o pasto
¿Sabías que el césped recién cortado y las malas hierbas son una rica fuente de nitrógeno y de nutrientes? Lo único que deberás hacer es agregar la hierba y el césped recién cortado a un recipiente con agua de 20 litros. Déjalo reposar durante un par de días. Luego, deberás diluir una taza de dicho compuesto en diez tazas de agua y así aplicarlo a las platas.
2. Fertilizantes naturales con cáscara de huevo
Otro de los compuestos más comunes en este tipo de fertilizantes son las cáscaras de huevo. Ellas no solo aportan carbonato cálcico a nuestro suelo, sino que actúan como repelentes contra plagas. Para crearlo, deberás pulverizar las cáscaras de huevo y rociar el polvo en la base de las plantas. También podrás agregarlas en piezas más grandes, para crear una barrera contra insectos y otros animales.
3. Estiércol
Sin duda alguna, el estiércol es una de las mejores formas de nutrir los suelos. Aunque se ha utilizado en los procesos de agricultura desde hace mucho tiempo, no siempre es fácil acceder a él, ya que muchos de sus tipos requieren de un proceso de compostaje anterior. Sin embargo, hay algunas soluciones: en primer lugar, si tienes conejos, cabras o gallinas, podrás usar sus excrementos para fertilizar la tierra.
En caso de que no sea así, encontrarás tiendas y comercios que ofrecen el estiércol de caballo ya procesado y listo para usar.
4. Hummus de lombriz
En la lista de fertilizantes naturales no podemos obviar al hummus de lombriz. Aunque este fertilizante se puede conseguir tanto sólido como líquido, vale resaltar que se conforma mayormente por lombrices rojas californianas y un compostaje creado con estiércol, restos orgánicos, papel y cartón.
5. Té de plátano
El alto contenido de potasio de las pieles de los plátanos resulta muy beneficioso para impulsar la floración de nuestras plantas. Lo ideal para sacarle el máximo provecho es dejar las cáscaras reposar en agua por un par de días. Luego de ello, podrás regar las platas con él y, ¡listo!
Aprende a elaborar fertilizantes que harán crecer tus plantas en corto tiempo
¿Quieres empezar a crear un eco-huerto? Comienza con este tipo de fertilizantes. Los fertilizantes naturales son fáciles de elaborar porque solo tienes que echar mano a productos sencillos y simples de conseguir en el mercado. Inclusive, muchos de ellos los puedes obtener dentro de tu propio hogar. Además, utilizándolos estarás contribuyendo con el equilibrio ecológico de la madre naturaleza.
Una de las recetas por excelencia para elaborar un buen fertilizante es la siguiente:
Ingredientes:
- Una cucharada de miel
- Una taza de leche
- Restos de cáscaras de huevos
Elaboración:
Con una cucharilla mezcla la leche con la miel con el fin de hacer una melaza. Sigue mezclando hasta que espese y vierte el preparado sobre la tierra de tu maceta o jardín. La leche y la miel son ricas en nutrientes y proteínas que harán crecer rápidamente tus plantas. Posteriormente, deja macerar las cáscaras de huevo en agua y 5 días después vierte sobre las macetas o el jardín. Tus plantas te lo agradecerán con creces.
¿Qué secretos sobre el fertilizantes naturales tienes tú que puedas compartir con todos nosotros? Anótalos en la sección de comentarios y muchos te lo agradecerán. Tampoco dejes de conocer estas frases sobre plantes. Sin duda, te inspirarán a crecer y trabajar en tu jardín. Gracias por leernos 🙂
