Cada vez son más las alternativas para optimizar recursos y reducir la contaminación que dejan los combustibles, sumado a las ventajas de las nuevas tecnologías en materia automotriz.

El número de vehículos que circulan a diario, sobre todo en las grandes ciudades, contamina el aire y el agua en altas cantidades siendo cada vez mayor el porcentaje de contaminantes que se encuentran en ellos. Desde hace varios años, las diferentes industrias trabajan en alternativas para producir energías sustentables que disminuyan el impacto negativo que dejan los combustibles y demás elementos contaminantes, y la industria automotriz no es la excepción.

Un ejemplo destacado en materia de energías sustentables son los autos eléctricos, que ya forman parte del escenario natural en varios países del mundo. Desde hace algún tiempo, se han comenzado a introducir modelos de propulsión sustentable en el mercado automotor, en particular los primeros modelos 100% eléctricos. Y en algunos lugares también están disponibles los vehículos híbridos.

La propulsión alternativa forma parte de una tendencia global de electrificar la movilidad, disminuir la emisión de contaminantes y coordinar acciones de sostenibilidad urbana. De este modo se busca que los autos eléctricos vayan reemplazando a los de combustión tradicional, y se trabaje en una transición hacia un parque automotor limpio, con los vehículos híbridos.

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Para impulsar las energías sustentables, los gobiernos de muchos países reducen y eliminan los aranceles de importación para autos eléctricos e híbridos, así como se derogan los impuestos automotores. Un ejemplo de esto es el acuerdo de libre comercio entre países, o que no paguen aranceles los modelos de motorización ecológica que sean ensamblados en cada país.

Medidas para incorporar energías sustentables

Algunos países, como Argentina, carecen de una infraestructura que soporte las energías sustentables, ya que se necesita montar una red de electrificación que responda a la creciente demanda de los consumidores “ecofriendly”. Pocas estaciones de carga cuentan con surtidores para autos eléctricos; no obstante, las automotrices están impulsando la llegada de estas energías al país.

Cada vez somos más conscientes de la necesidad de cuidar el medio ambiente. Un caso ejemplar es Noruega, ya que aquel que compra un coche eléctrico queda exento del pago de los impuestos. Además, los usuarios no pagan peaje, pueden estacionar sin pagar el ticket y cuentan con una red de recarga pública completamente gratuita.

Ventajas y desventajas de un vehículo ecológico

La oferta de vehículos de combustible alternativo es cada vez mayor. Se denominan “vehículos ecológicos” porque su uso no influye negativamente en el medio ambiente y contribuyen a disminuir la presencia de gases contaminantes en la atmósfera. Los tipos principales de combustibles alternativos son la electricidad, el gas natural y el gas licuado del petróleo. Existen otros, como el hidrógeno, pero todavía no tienen modelos comerciales accesibles al público.

  • Eléctricos: no contaminan, ni a través de emisiones ni por ruido; ahorra en combustible; se puede recargar la batería casi en cualquier enchufe; tiene mayor vida útil. Las desventajas son que la batería se debe cambiar en periodos de tiempo más cortos, el tiempo de recarga completa es largo, y hay pocas estaciones de recarga.
  • Híbridos: usan batería y cuando esta se termina usan la gasolina de su segundo depósito; ahorra dinero, porque su consumo disminuye; no recarga la batería en un punto de alimentación. Los contras son que son más caros que los de combustión normal, pesan más porque llevan dos motores y las revisiones son más complejas, debido al sistema dual que tienen.
  • Bi-fuel: poseen mayor autonomía y un perfil más ecológico, puesto que reduce emisiones contaminantes. Sin embargo, necesita espacio extra para los depósitos de gas comprimido, que consumen más combustible, pero con un costo por kilómetro menor.

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Otras formas sustentables de viajar en auto

Si bien las energías sustentables son un gran avance en materia ecológica, se necesitan varios años aún para instalarlas en la sociedad. Mientras tanto, hay hábitos que podemos cambiar mientras estamos al volante, y así evitar un consumo extra. Aquí algunos consejos de Comparaencasa.com:

  • No acelerar de golpe: se suele cometer el error de pisar el acelerador para que el motor caliente antes, pero si hace frío, el auto necesita unos minutos para que todos los circuitos lleguen a su temperatura óptima de funcionamiento.
  • Apagar el motor si el vehículo está parado, evitando el consumo de carburante durante este periodo.
  • Aprovecha la inercia del vehículo, para una conducción tranquila y mantenida. Si vas a detenerte, suelta el acelerador y deja que el coche pierda velocidad por sí solo.
  • Mantenimiento: para ahorrar combustible, el motor tiene que estar en un estado óptimo, así como los filtros, lubricantes, líquidos y demás elementos.
  • Neumáticos: deben estar en perfecto estado. Si tienen un exceso o defecto de presión, además de ser un peligro para la circulación generan un trabajo adicional al propulsor, y eso consume más combustible.
  • Calefacción y aire acondicionado: ambos sistemas necesitan unos minutos para funcionar correctamente. Si los apuramos solo vamos a mover aire, generando un consumo de energía inútil.
  • Ventanillas: a veces preferimos bajar las ventanillas que poner el aire acondicionado. Esto es válido en ciudad, a baja velocidad, pero no en ruta. Al entrar el aire por las ventanas se rompe con el flujo del aire y se genera un freno que obliga a un exceso de trabajo del motor, y esto se nota en el nivel del depósito.

Siguiendo estos consejos útiles, podrás ahorrar en combustible y cuidar tu auto, ayudando a disminuir las emisiones que afectan de manera negativa al medio ambiente.

Autora: Débora Brizuela