México es país lider en los esfuerzos políticos globales para proteger el ambiente. Al mismo tiempo, los desafíos que los propios mexicanos enfrentan puertas adentro son enormes. Y los encaran con distintas iniciativas positivas; aquí te contaremos algunas que tocan a su capital, Ciudad de México, mundialmente famosa por superpoblada, pero también por su contaminación.
Agua caliente eco amigable
México es una ciudad donde puede hacer mucho frío, por tanto las duchas calientes son bien apetecibles. Para la mayoría de los pobladores son inaccesibles, o muy caras por lo mucho que aumentan la tarifa de electricidad. Ahora tienen una alternativa que además de bajar la factura mensual no contamina, es totalmente limpia.
Se trata de calentadores de agua que funcionan gracias a una placa con paneles solares que se coloca en el techo de la vivienda. Uno puede contar con el calentador aún cuando no haya sol, porque el sistema almacena la energía. Su costo de instalación es alto, pero un programa del Estado Mexicano con apoyo de la Ministerio de Medio Ambiente alemán otorga subsidios a los ciudadanos para su adquisición.
El edificio que se traga el smog
Un pequeño aporte privado que si otros imitan puede ser de gran ayuda. El edificio de la Torre de Especialidades Medicas tiene como parte de su fachada una estructura blanca -desarrollada por una empresa alemana de arquitectura- que se asemeja a una especie de malla de corales y está bañada en dióxido de titanio, por lo que al contacto con los rayos del sol y el smog desencadena reacciones químicas que absorben este último, llegando a neutralizar la contaminación producida por unos 1.000 automóviles diarios.
Reciclaje bueno para el planeta, tu conciencia…y tu bolsillo.
La empresa mexicana Hensheng instaló desde 2014 en distintos sitios públicos de la capital, y ya también en algunas otras ciudades, unas máquinas similares a las expendedoras o máquinas vending que se pueden ver en cualquier parte del mundo. Pero en estas máquinas uno desecha botellas plásticas o latas de aluminio y automáticamente es compensado con dinero electrónico o con puntos en una tarjeta personal.
Los puntos o el dinero pueden usarse luego para obtener diversos descuentos, pagar transporte público, comprar cualquier tipo de servicio o artículos o hasta hacer donaciones a ONGs o fundaciones. Importantísimo aporte en esta mega urbe, donde diariamente se producen 12 mil toneladas de residuos sólidos que terminan contaminando el ambiente.
Trasladarse sin agredir el ambiente
Anualmente 4 mil personas mueren en esta capital por causas relacionadas con la mala calidad del aire que respiran. Los más de 4 millones de automóviles que circulan en Ciudad de México son factor principal en la generación del insalubre monóxido de carbono y otros gases que aumentan el calentamiento global.
«Hoy no circula» es el programa de la ciudad que desde 1989 monitorea cada automóvil decidiendo si los niveles de contaminantes que emite son tolerables y (lo más importante), de acuerdo al número de matrícula del auto prohibe diariamente la circulación de 560 mil de ellos, disminuyendo en 11% anual la contaminación.
Sistemas de transporte público masivo como Metro, MetroBus y TroleBus además de ser parcial o totalmente «limpios», ayudan mucho al estimular a no usar autos particulares. Otro aporte importante que debe convertirse en tendencia creciente -tomando en cuenta que el 80% de los viajes en la ciudad son menores a 8 Km- son los servicios de Eco Bicicletas eléctricas que están apareciendo y permiten en algunas áreas de la capital alquilar bicis que luego uno entrega al llegar a su destino. Y para viajes más largos empieza a asomar tímidamente la opción de los autos eléctricos, teniéndose previsto que en 2015 se instalarán 30 «electrolineras» para recargar este tipo de vehículos.
Si vives en México nos gustaría saber que opinas de todo esto. Y si no vives allí, que nos cuentes si en tu ciudad hay estrategias similares, o si te gustaría que en ella se implementara alguna de las que acabas de ver aquí.
Imágenes: Dennis Jarvis, Omar