Hay momentos en la historia de la humanidad que suponen un cambio radical en la vida de la población que en esos tiempos habitaba el planeta. En la actualidad, el sector tecnológico está marcando el devenir del futuro de varias generaciones, cambiando sus hábitos de vida y estando permanentemente interactuando con los dispositivos de nueva generación que han llegado para quedarse.

Pero como todo en la vida, todo progreso tiene su parte positiva y negativa. En este último aspecto se encuentra, sin ningún género de dudas, los excesivos desechos electrónicos generados como consecuencia de esta oda de consumismo feroz en la que está inmersa la sociedad en los países desarrollados. Cambiar de televisor, de celular, o de electrodomésticos hace unas décadas era un lujo solo al alcance de muy pocos privilegiados. En la actualidad, todo eso ha cambiado, debido en gran medida al abaratamiento de todos estos aparatos electrónicos, y a la constante innovación del sector, que hace que cada día haya nuevos dispositivos en el mercado más potentes que los comprados un mes antes.

Un problema en la nueva era tecnológica: el e-waste

E-waste, un problema de la nueva era tecnológica 2

Todo ello constituye el fenómeno del e-waste, que hace referencia ni más ni menos a la cantidad de chatarra electrónica por cada ciudadano generada como consecuencia de estos nuevos hábitos de consumo. Betway casino online ha presentado recientemente un estudio con numerosas voces autorizadas que pone el foco sobre esta tesitura, que puede hacer peligrar los ecosistemas tal y como los conocemos en la actualidad.

En 2017, últimos datos contrastados por el estudio Global E-waste Monitor, se produjeron 44,7 millones de toneladas de residuos electrónicos a nivel mundial, de las que solo el 20% tuvieron un tratamiento óptimo de eliminación por medio de plantas especializadas en el reciclaje de estos productos. El 80% restante se arrojó directamente al medio ambiente, o bien a contenedores genéricos en los que no se puede dar el tratamiento correcto a este e-waste.

La concienciación de la población debe ser el instrumento que haga ir paliando este desastre en forma de contaminación medioambiental poco a poco. La compra de estos productos no va a cesar, sino que más bien se multiplicará en los próximos años. Por ello es necesario tomar sentido de lo que se debe hacer con la basura electrónica.