¿Estás obsesionado con tu figura? El hombre y la mujer del siglo XXI se han impuesto rígidas ideas en cuanto al patrón de belleza que deben lucir. El peso y las medidas del cuerpo en 90–60–90 para las mujeres, las ha llevado a cometer todo tipo de locuras para atraer al sexo opuesto y además competir ante las otras chicas. Los hombres, claro, no se quedan atrás. Por eso diversas dietas afloran, pero no todas son tan correctas…
La guerra de las dietas
Muchas personas suelen hacer verdaderas hazañas con las dietas y, por supuesto, lo primero que suelen hacer es eliminar los carbohidratos de su mesa tal como muchos consejeros de belleza se los han sugerido.
La obsesión sigue y el intento de eliminar de la dieta la ingesta de pan, pastas y harinas precocidas es prácticamente un sueño deseado, más no alcanzado.
Hablan los nutricionistas
Los expertos en nutrición aseguran que todos los alimentos deben ser ingeridos en la proporción adecuada. Y en todo caso, su eliminación amerita ciertas atenciones que cuidar para evitar futuros incidentes en la salud. Ningún alimento o rubro de la dieta básica debiera ser eliminado, porque al no consumirlo, estarías perdiendo el aporte que estos pueden ofrecerte.
Todos los alimentos son indispensables
Las carnes suelen proporcionar las proteínas; los vegetales brindan vitaminas y nutrientes para sobrevivir; las hortalizas son ricas en antioxidantes, por lo que son ideales para fortalecer el sistema inmunológico, pero ¿sabes que te aportan los carbohidratos?
Los carbohidratos proporcionan energía para moverte y rendir a plenitud en tu jornada diaria, además son muy buenos para todo el sistema digestivo y la producción de las heces. Por eso, ¿crees que es sensato sacarlos de tu dieta?
Todo en su justa medida
Procura no eliminar los carbohidratos de tu dieta, ellos son los responsables de darte todo el vigor que necesitas para que tus músculos funcionen a la perfección. Si realizas ejercicios, menos aún debes eliminarlos, porque podrías quedarte sin “combustible” y sufrir ciertos desmayos o bajas de presión sanguínea mientras estés ejercitando.
Lo ideal es que consultes a tu nutricionista para que puedas consumir carbohidratos en las porciones necesarias para tu peso y contextura, a las horas indicadas o momentos adecuados del día y, al mismo tiempo, no estarás eliminando el gusto de comer esas ricas pastas que tanto nos enloquecen.
Comparte el artículo con tus amigos y amigas que gustan de hacer dietas regularmente, puedes ayudar mucho en su bienestar.