Las instalaciones termohidráulicas ocupan un papel central en el ahorro energético en casa. Reducir el consumo sin renunciar al confort, con el beneficio adicional de hacer algo bueno para el medio ambiente, es un objetivo alcanzable si se confía en tecnología de última generación, productos de calidad y competencia técnica.
El mundo de la termohidráulica es complejo y amplio, abarcando diversas funciones. Las instalaciones termohidráulicas, de hecho, sirven para calentar la casa en invierno, enfriarla en verano, conducir agua potable y producir agua caliente sanitaria. Un profesional experimentado sabe que, para crear estos sistemas complejos, se necesitan las soluciones más eficientes y los componentes más fiables.
Entonces, ¿cómo podemos maximizar la eficiencia de estos sistemas y hacer la elección más estratégica para el ahorro energético de nuestro hogar?
Elecciones estratégicas para instalaciones termohidráulicas eficientes.
Comencemos con la caldera. En un escenario que se dirige hacia la eliminación gradual de las calderas de gas, las calderas de condensación están experimentando una tendencia positiva. Ecológicas y fáciles de instalar, las calderas de condensación aseguran un ahorro significativo en comparación con las tradicionales. Sin embargo, requieren una gestión adecuada de la condensación ácida y corrosiva, que debe eliminarse correctamente. En este sentido, si no es posible canalizarla por gravedad, existen bombas de condensados específicas que resuelven el problema de manera sencilla.
Además de la caldera generadora de calor, el sistema termohidráulico también incluye la red de distribución y los terminales de emisión. El tipo de sistema más extendido es la calefacción por suelo radiante. Este sistema, que utiliza el principio de radiación, asegura un calor uniforme y un bajo consumo de energía. Para una instalación bien realizada, es crucial utilizar intercambiadores de calor y colectores que permitan zonificar y aislar los circuitos, facilitando así el mantenimiento y proporcionando flexibilidad para operar según las necesidades reales.
Termohidráulica y acero inoxidable: las ventajas.
Una consideración especial en las instalaciones termohidráulicas se refiere a la elección de materiales. En este sentido, el acero inoxidable es una elección acertada. Resistente a la corrosión e higiénico, el acero inoxidable ofrece muchas ventajas cuando se emplea en la manipulación de fluidos. Las tuberías, conexiones, válvulas y colectores de acero inoxidable son una inversión, ya que permiten crear instalaciones termohidráulicas duraderas, reduciendo los costos de mantenimiento y de reemplazo de componentes. Igualmente importante es el aspecto del rendimiento hidráulico, ya que el acero inoxidable reduce las pérdidas de carga, disminuyendo así los costos energéticos para el movimiento del agua.
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