Un problema grave para nuestra salud, y que suele pasar desapercibido, es la contaminación por microondas. ¿Conoces su impacto? Aquí compartiremos valiosa información para que puedas prever y cuidar de ti y de los tuyos.

Cuidado con el campo electromagnético

Usando una metáfora de espionaje, el campo electromagnético es el agente secreto perfecto: es invisible, no se lo puede sentir ni percibir, no lo puedes ni oír ni oler, pero sus efectos, aunque probablemente imperceptibles para la mayoría de los humanos (no así para las especies animales, como veremos a continuación), son implacables. Este campo electromagnético es generado por aparatos electrónicos usuales en nuestra vida, como los móviles inteligentes, las tablets y los emisores wi-fi, además de las antenas repetidoras de señal, cada vez más omnipresentes en nuestros paisajes, que han pasado del color verde y marrón de los árboles, al frío plateado acero de las antenas.

entrepreneur

En el Instituto de Medio Ambiente de la Conserjería de Castilla y León, se llevó a cabo un estudio sobre el efecto de dichas emisiones sobre renacuajos. A 140 metros de antenas de telefonía, se dividió a una población en dos grupos; unos protegidos de la radiación, y otros no. Los “blindados” se desarrollaron normalmente; sin embargo, los desprotegidos crecieron de forma desigual y solo el 10% sobrevivió.

Las campañas de marketing silencian el impacto ambiental

El continuo atosigamiento al que nos someten las campañas de marketing que nos susurran con tenacidad: “debes tener un teléfono móvil”, “no se puede vivir hoy sin smartphones…”, simplemente encubre una descarada persecución de los ingentes beneficios que esta industria genera, al menos en cuanto a dinero. Pero ¿es cierto que no se puede vivir sin móvil?

Puede ser, sin embargo, también es cierto que cada vez es más peligroso vivir con smartphones, así como con todos los aparatos electrónicos digitales, tablets, routers, etcétera, etcétera, con que diariamente convivimos, ya que como demuestran los experimentos, y parafraseando a Olle Johansson, del Instituto Karolinska de Suecia: “Estamos sentados sobre niveles (3G) que son un millón de millones de veces superiores al fondo natural electromagnético”, lo que sugiere la cuestión de si estamos evolutivamente preparados para semejante bombardeo, a lo que por supuesto hay que responder: ¡NO!

Las investigaciones refuerzan los efectos negativos de la contaminación por microondas

Otro de los experimentos que ilustran estas afirmaciones lo desarrolló Katie Haggerty, una investigadora que diseñó una prueba con álamos en tres parcelas cuidadosamente planificadas: en una, se plantó plántulas de álamo y se protegió de la emisión de radiofrecuencia que provenía de un pueblo cercano; otra parcela fue objeto de una especie de simulacro de blindaje; y la tercera quedó totalmente desprotegida. Como se publicó con posterioridad, los álamos totalmente blindados crecieron fuertes y sanos, pero las dos parcelas restantes dieron como resultado árboles pequeños, delgados, sin pigmentación y con hojas de aspecto enfermizo.

smarphone

Para finalizar, ilustraremos estos efectos de nuestros teléfonos móviles sobre una colonia de hormigas: si se somete a una colonia a una señal débil, las hormigas se confunden hasta el extremo de olvidar completamente las señales que las llevaron a sus fuentes de alimento.

Así pues, la pregunta persiste: ¿es imposible vivir sin teléfonos móviles? Hagamos la prueba, y sobre todo hagamos un sencillo experimento para comprobar la contaminación por microondas: desconectemos todos nuestros emisores electromagnéticos y emisores wi-fi de las proximidades de nuestra casa durante las noches… ¿Qué tal?, ¿duermes mejor?

Si te pareció interesante esta información, no dudes en compartirla para que sean muchos más lo que puedan beneficiarse.